domingo, 27 de marzo de 2011

Prados verde vida

But forever I'll feed the ferryman's greed
with an empty promise for my lost soul
Tony Kakko

Quisiera recorder el reflejo
  como se mostró aquella vez.
Miguel de Segura

Tu alma tibia sin ti que no te entiende.
Amor, amor, un vuelo de la corza
por el pecho sin fin de la blancura.
Y tu niñez, amor, y tu niñez.
Federico García Lorca


Si hubiera habido prados, prados verde vida, habríamos tal vez corrido por ellos, con Bombadil y los hobbits a los flancos. Si hubiera habido perros ladrando sanos, ríos, o medio bosque, en lugar de medio árbol. Si hubiera habido lagos, si el mar fueran los prados. Si hubiera habido inviernos, o estrellas, o si más allá de las torres yaciera la grupa suave de los campos. Si durara, si hubiera caído una noche sola la nieve en los tejados.
     Pero aquí era casi siempre sol, sal y arena y cal en los muros blancos; no sé, apenas recuerdo qué había entre verano y verano. Una vez vino un barco. Echó el ancla ante mis balcones, y en las tardes más sucias lo veíamos pudriendo la bahía, supurando crudo y sentina, como el cadáver de algo ya corrupto en vida, como una oda flotante al escombro y el óxido. Pasó meses vomitando tierra en las aguas: traía cada día llenas de cieno las bodegas, y allanaba el mar nuestro de cada día. Quizá nos fascinaba entonces, pero el miedo al barco que agrandaba la playa ha cuajado sólo ahora, cuando es un hecho consumado y la playa es negra y enorme, cuando las playas negras y enormes reptan y devoran la pureza de los guijarros y los sueños de los peces, y ellos se frotan los anillos en los despachos, y a veces las monedas en enjambres furiosos / taladran y devoran abandonados niños.
     La huída empezó un año de aquelos, una noche también en la playa, en el asiento de atrás de un Xantia plateado. Yo era todavía virgen y estúpido, y creí dejar de serlo cuando la Luna estalló roja entre las nubes, y el Kyrie de Mozart en la radio. Desde entonces huyo, desde que sé de otros lugares, y me contaron de Beleriand, de los Silmarils y de las brumas de Ulmo, y de las callejuelas de Arkham y de la Ciudad del Sol Poniente. Desde entonces en la penumbra de los bares busco, buscamos a Randolph Carter, y desde entonces marcho, marchamos hacia el Oeste. Creo que alguna vez pensamos en llegar, pero a Tirion se la han tragado las nubes; las águilas acechan Númenor, y Gondolin no es ya un lugar seguro. Ignoro dónde guardé la Llave de plata. Llach y Kavafis, aún así, nos hablaban a veces del consuelo.



     Ahora la verdad es otra, y nadie ladra, pero aún cabalgamos; algunos sabéis de qué hablo. Hemos hollado las flores de otros valles, hemos huido del silencio por libros de lenguajes extraños, y el viento peinaba la crin de los corceles, pero la brida ata siempre la mano. Vosotros sabéis de qué hablo, medio hermanos de lágrimas, yonquis del largo abrazo. Sabéis del jadeo seco, del galope entrecortado. Vosotros, y yo y entonces nosotros, jinetes del escalofrío, lotófagos de lo sublime, esclavos de los esclavos. Gritamos, siempre lo mismo: ¡si hubiera habido prados!
     Importa menos que nada quién se llevó el último nudo, quien desató la cinta blanca. Ahora el gris nos moja los labios, y nos pringa la piel la calima de lo cotidiano. Nos he visto en la niebla, caminando encorvados. Siempre regresamos, como de una guerra sin gloria, siempre la brida en la mano. La herrumbre chirría en los arneses embarrados, y fingimos, en un acuerdo tácito, que nos limpiamos las heridas; con el tiempo que hace que no sangramos. Sólo nos cruzamos en los tranvías, compartimos un cigarro o mordemos las mismas manzanas, y de vez en cuando, imagino que murmuramos esta luz no es la nuestra; ven, Stevie Ray; y soñamos, sí, con un Dios aficionado a los acuarios.



3 comentarios:

  1. fantastico; jodidamente melancolico, me ha calado hondo.

    Sigue dandole caña judio barbudo!!!

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  2. ACTUALIZA Y PON MAS COSAS !! XD

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  3. Quién fuera ese folio en blanco o el teclado de tu ordenador... Los que no, hemos de conformarnos con conversaciones triviales, miradas que pretenden callar y a veces, sólo a veces, una oportunidad mal aprovechada de follarte la mente...

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